Siempre hay un motivo para volver a visitar Valencia, una ciudad preciosa y acogedora. Como sabréis por mis redes sociales, me encanta acudir a sus fiestas más famosas, las Fallas, cosa que hago siempre que me es posible, y vivirlas con entusiasmo, como hacen los valencianos. Visitar su catedral, si acudes en tus vacaciones o en los puentes, merece muchísimo la pena. Nosotros lo hicimos el pasado día 15 de agosto de 2024, Festividad de la Asunción, y no pudimos elegir mejor día. Coincidiendo con la Festividad de María, estaba expuesta una hermosa imagen de la Virgen yacente, algo que nunca habíamos visto.
Si vaís por Valencia en Semana Santa no dudéis en acercaros a su catedral y visitar la famosa reliquia del Santo Cáliz.

Una de las razones por las que nosotros fuimos a visitar la catedral valenciana el pasado verano fue para ver este famoso Cáliz que guardan en una de sus capillas principales. ¿Y si se tratase del Santo Cáliz el Santo Grial? Qué emocionante… Se expone como un tesoro en la Seu, la iglesia catedral-basílica metropolitana de la Asunción de Nuestra Señora, de Valencia. Es una de sus joyas más valiosas.

Se trata de una hermosa copa en forma de bol, tallada y pulida, de una variante de ágata sardónice procedente de la zona entre Alejandría y Siria. «Sin ninguna duda es una pieza palestinense realizada en el siglo I antes de Cristo, una copa de Bendición judía«.
En el siglo XI, para su protección, se completó con un rico relicario, con una base de copa invertida y unas asas, con perlas y piedras preciosas. La copa se ha mantenido austera y sin adornos, como en el siglo I. Los Papas San Juan Pablo II (1982) y Benedicto XVI ( 2006) celebraron con este Santo Cáliz la Eucaristía en Valencia, como por tradición hicieron los Papas hasta el siglo III. Y… muy posiblemente Jesús en la Última Cena (qué bonito sería que así hubiera sido, tal vez lo fue). Como tal es venerada en Valencia y, de lo que no cabe duda, es que este Cáliz posee gran valor arqueológico, histórico, artístico y cultural. Y espiritual. Sea o no sea la que utilizó Jesucristo, la han empleado numerosos Papas hasta la actualidad. Nos ha encantado verla y admirarla.

En la catedral nos informan que es una taza de ágata, que procede del arte oriental del siglo I. Y que sus asas y pie son medievales. Por tradición en la catedral valenciana consideran que es la misma Copa que utilizó Jesús en la Última Cena, cuando instituyó la Eucaristía.
Se cree que fue llevada a Roma por el apóstol San Pedro y fue conservada por sus sucesores hasta el Papa Sixto II. Mediante el diácono de este Papa, San Lorenzo, que era español la trajo a su tierra natal en Huesca, en el siglo III, cuando huyó de la persecución del emperador Valeriano.
Ahora hacemos un inciso, para ofrecerte unas interesantes imágenes. Son de la catedral de Valencia, donde está la sagrada reliquia, merece una visita… Es una catedral preciosa, un lugar muy especial. En el siguiente carrusel, un pequeño resumen de nuestra pasada visita…
Continuamos ahora con la historia de la preciosa reliquia, expuesta en la catedral valenciana. Durante la invasión musulmana se ocultó por la región de los Pirineos, y por último se llevó al monasterio de San Juan de la Peña, en Huesca. En el transcurso del tiempo estuvo también en en el palacio real de la Aljafería de Zaragoza y en el Real de Valencia, hasta que se entregó a la catedral de Valencia, con motivo del viaje del rey Alfonso V el Magnánimo a Nápoles, en el año 1437. Lleva por tanto en la catedral de Valencia 588 años, va camino de los 6 siglos.
Hasta el siglo XVIII se empleó para contener la forma consagrada en el «monumento» el día del Jueves Santo, por tanto tuvo un papel protagonista en la Semana Santa de Valencia. Después se instaló en una Capilla habilitada para exponerla y rendirle culto, en un espacio de la antigua Sala Capitular, en el año 1916. Durante la Guerra Civil (1936-1939) fue ocultada y protegida en el pueblo valenciano de Carlet.

Considerada una reliquia, una importante reliquia, es una bellísima taza o copa de piedra ágata coralina, torneada con delicadeza, a la que los arqueólogos describen de estilo y origen oriental y datan en el siglo I de nuestra era.
Es muy posible que este hermoso cáliz pasara por las manos de Jesucristo, cuando la noche antes de su Pasión y muerte, tomó pan en sus manos, lo alzó al cielo, lo bendijo, partió y dio a sus discípulos diciendo: «Tomad y comed todos de él, porque esto es mi Cuerpo, que será entregado por vosotros«.
Y acabada la Cena tomó el cáliz glorioso, lo bendijo y dio a sus discípulos, diciendo: «Tomad y bebed todos de él, porque éste es el cáliz de mi Sangre, Sangre de la alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por todos los hombres para el perdón de los pecados. Haced esto en conmemoración mía«.
Plegaria eucarística I, Canon romano. Cf. Mateo 26-29; Marcos 14, 22-25; Lucas 22, 15-20 y I Coríntios 11, 23-25.
Además, todos los jueves, a las 20.00 horas en la Capilla del Santo Cáliz se celebra la santa misa, ante la sagrada reliquia. Patrocinada por la Real Hermandad y la Cofradía del Santo Cáliz. Su fiesta solemne se celebra el último jueves del mes de octubre. Atención a estos datos, si has pensado ir a visitar la santa reliquia.
Si vas a Valencia esta Semana Santa, además de visitar su catedral, puedes vivir su Semana Santa Marinera: