Siempre es un placer acercarse a la catedral de Madrid, para dedicar un momento a la oración, rezar a nuestra patrona, la Virgen de la Almudena, y contemplar algunos de los tesoros que en ella se encuentran. Uno de nuestros favoritos es el Arca de San Isidro, en una de las capillas del templo madrileño.
Durante la Edad Media se regalaron dos arcones funerarios para conservar el cuerpo del Santo Patrón de Madrid y de los Agricultores, Isidro Labrador, gran devoto de la Virgen de la Almudena, por cierto. Uno de ellos es el que puede contemplarse en una de las capillas de la catedral madrileña, de gran belleza. Es uno de los muebles más antiguos que existen hoy en la capital y, según opinión de muchos expertos, es la pieza de mobiliario medieval más importante de Europa. Espectacular.
Data de finales del siglo XIII y es de gran belleza, merece la pena ir a verla. El arca consta de un armazón de madera de pino cubierta de pergamino, con pinturas de estilo gótico lineal parcialmente conservadas.
En la parte frontal del Arca, el más visible dada su situación, podemos contemplar tres milagros atribuidos al santo madrileño. De izquierda a derecha: primero el milagro de la yunta de bueyes guiados por ángeles, mientras el santo rezaba; después el milagro de la multiplicación del trigo en el molino y por último el milagro de la olla.
En los laterales del Arca se representan la escena de la Anunciación a un lado, y Cristo varón de dolores flanqueado por Santa María Magdalena y la Virgen María, al otro lado.
Es importante saber que esta magnífica y desconocida pieza, para mucha gente, contuvo el cuerpo del santo hasta 1620.
Cuando se consagró la catedra por el Papa Juan Pablo II, el Arca fue trasladada a este templo para su exposición, donde permanece hasta hoy. Los cuerpos de San Isidro y de Santa María de la Cabeza descansan hoy en la Colegiata de San Isidro, en la madrileña calle Toledo. Antes el cuerpo de nuestro Patrón estuvo en la Iglesia de San Andrés, muy cerca de la casa donde vivió, que en la actualidad alberga la Casa Museo de San Isidro, cuya visita también recomendamos.
Tallas de San Isidro y de Santa María de la Cabeza
Si te acercas a contemplar el Arca podrás observar dos hermosas tallas a izquierda y derecha del altar donde se encuentra el antiguo sepulcro de madera de pino, delante de la verja. Una magnífica pareja de tallas en madera policromada con decoraciones estucadas en dorado dibujando numerosos motivos vegetales. Se atribuyen al artista Juan Alonso de Villabrille y Ron, de estilo barroco. Poseen gran naturalismo, como podemos ver en ambos rostros. Lucen vestimentas y complementos que van de acuerdo a los modelos iconográficos conocidos durante el siglo XVII.
San Isidro, a la izquierda, va tocado con un nimbo, símbolo de que es santo. Lleva un ramo de espigas de trigo en la mano izquierda, que aluden a su condición de labrador. En la derecha lleva una aguijada que recuerda los pozos de agua que abrió o el milagro de la yunta de bueyes. Su mujer, Santa María de la Cabeza, lleva también un nimbo en su cabeza, de santidad. Ella porta el hachón y la alcuza de aceite con los que encendía las lámparas a la Virgen.
Durante años ambas figuras han flanqueado el arca medieval, en la capilla dedicada al Patrono de Madrid, en la catedral de la Almudena. En el centro del altar, un cuadro donde está representado el milagro del pozo.
Destaca en la vestimenta de San Isidro su camisa lechuguilla, sayo con abotonadura y ajustado al torso, mangas bombachas con brahones y cinto ceñido, calzones hasta las rodillas y polainas. Por su parte, Santa María de la Cabeza luce un faldallín con mangas cortas con aldetas o aberturas, sobre una camisa blanca, toca larga, que cubre su cabeza y cuello, grueso manto a la cintura, que recuerda el milagro del río y falda larga.
No dejes de ir a descubrir esta interesante capilla dedicada al Santo Patrón de Madrid. En ella, a la izquierda del altar, se encuentra también la tumba del Cardenal Ángel Suquía Goicoechea (1916-2006), Arzobispo de Madrid.
